Una "bienvenida amorosa" incluye contacto, afecto, escucha, contención. El masaje infantil no va de técnica. Es conectar y comunicarse con atención, respeto y mimo, con miradas, sonidos, caricias ...
Cosas que no te enseñan los vídeos de YouTube: ¿estoy haciendo bien sol y luna?¿por qué hace eso mi bebé?¿este aceite es adecuado? Afortunadamente, algunas matronas en centros de salud están formadas en masaje infantil y podrán ayudarte con tus dudas.
Aunque también he encontrado mamás que tras recibir el curso me han dicho «¡ostras, esto no me lo habían explicado!» o que pensaban que «pedir permiso» no era algo tan esencial, por ejemplo. Más de una se ha apuntado al curso con su segundo bebé («pobre, lo llevo al trote del mayor, quiero dedicarle un rato exclusivo») diciendo que al primero no le gustaba el masaje. Y me quedo imaginando, qué pudo pasar para que se quedara con esa impresión.
Lo cierto es que hay sutilezas que cuesta transmitir en un grupo grande: estar atenta a las señales de cada bebé para aprender a interpretarlas, corregir movimientos que -mal realizados- pueden resultar molestos e incómodos para el bebé (aunque no vayan a causar daño…), todos esos «truquis» y anécdotas que ayudan a tener más recursos y soltura en la práctica cotidiana. Disfrutar a tope estos primeros meses con tu criatura.
Por ejemplo, ¿sabes qué es esto? (¡mis alumnos/as, sí!)
Desde el vientre
Ya desde el embarazo puedes conectar con tu bebé: conocer la importancia del tacto afectivo y utilizar recursos variados (caricias, golpecitos y también música, rimas, etc.) para potenciar ese vínculo de amor, desde el respeto y la escucha.
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El lenguaje de la piel
El sentido más desarrollado en el vientre y el «primer lenguaje» que entenderá tu bebé nada más nacer: cómo es sostenido/a, acunado/a, acariciado/a… El diálogo tónico va mucho más allá del momento «masaje».
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¡SOS cólicos!
Una pequeña guía para p/madres desesperados/as: cómo averiguar si tu bebé tiene «cólicos» (y cómo entender el «llanto de liberación» o emocional), y cómo puedes ayudarle con el masaje.
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¿Cuándo puedo empezar?
Si puedes pasar la mayor parte del tiempo con tu recién nacido/a piel con piel, al principio no necesitáis más.
Si por temas de salud no fue posible, con más motivo el porteo y el masaje os ayudarán a conectar y disfrutar de ese contacto nutritivo.
A partir de que el bebé tenga un mes, puede ser un buen momento para recibir el curso (te aconsejo concertar cita con suficiente antelación)
Cómo elegir el momento y preparar el ambiente
¿Sabes en qué consiste la alerta tranquila? Aprovecha esos momentos y ten preparado un espacio calentito, cómodo y con los materiales necesarios a mano para disfrutar de vuestra sesión de «tiempo especial». Móvil fuera, nada de interrupciones. ¡Vamos allá!
Aquí te dejo un listado y consejos básicos para empezar.
Sobre mí
Me llamo Edurne García, desde 2011 soy Educadora de Masaje Infantil certificada por la International Association of Infant Massaje y socia de AEMI (nº 3071), especializada en Masaje y juego para niños de 1 a 6 años, y en Cuentos sobre la piel.
Diplomada en Educación y Juego (Universitat de València, 2008), también me formé en yoga prenatal y con bebés (con Tere Puig) y como doula (Nacer y Renacer), antes de ser mamá. Un lujo 🙂
Desde entonces he profundizado en Acompañamiento respetuoso a la infancia (con Tinus Wijnakker), Reflexología para la maternidad (Mauricio Kruchik), Hipnoparto – Método Naces … y ¡sigo practicando, enseñando y aprendiendo!
Únete a la experiencia y comparte con otras familias
¡SÓLO PARA ALUMNOS/AS! Si vives en Valencia o cerca y te apetece encontrarte con otras familias, puedes apuntarte a una quedada presencial. Buena ocasión para conoceros en persona, compartir experiencias (no sólo de masaje) y «hacer tribu» con los peques. Apúntate al grupo privado en Facebook 😉